Estos son los spots World Class con las mejores olas de todo el Cantábrico.
El Mar Cantábrico baña más de 800 kilómetros de costa desde Galicia, pasando por Asturias y Cantabria, hasta Euskadi. Si las condiciones acompañan, hay cientos de spots de surfing que pueden regalarte algunas de las mejores sesiones de tu vida. Éstas son algunas de las mejores playas para surfear en la España Verde:
MUNDAKA
Mundaka es la joya de la corona de la costa vizcaína. Durante los meses de otoño-invierno su prodigiosa barra de arena produce olas de una calidad sin igual. Su tubo de izquierdas la coloca en el ranking como «la mejor izquierda de Europa» y no es ninguna exageración. Situada en la margen izquierda de la ría de Urdaibai, a las puertas de su desembocadura, Mundaka es un sueño hecho realidad para cualquier surfer. Eso sí, como cualquier spot de clase mundial, es una ola muy demandada. En un día «classic», se pueden contar en el agua más de 200 surfistas en las horas próximas a la bajamar.
RODILES
Junto a Mundaka, Rodiles es una de las mejores beach breaks de Europa. Ubicada en la desembocadura de la ría de Villaviciosa (Asturias), la ola de Rodiles es conocida internacionalmente por sus tubos que colocan a esta joya asturiana entre los 100 mejores spots del mundo. Se surfea primordialmente en bajamar y, como Mundaka, es una ola muy demandada y frecuentada por locales, con lo que el respeto es una premisa fundamental a la hora de aventurarse a sus aguas.
EL BRUSCO
Situada en la localidad cántabra de Noja, en la parte final de su playa de Trengandín, El Brusco es una ola algo caprichosa. Necesita vientos de componente sur y marea alta. También un buen golpe de mar para mostrar su cara más preciada: sus tubos. Es una ola muy potente que nadie diría que rompe sobre fondo de arena.
PANTÍN
La playa de Pantín (llamada oficialmente playa de Rodo) se localiza en el concello gallego de Valdoviño, A Coruña, en plena comarca de Ferrolterra. Es un spot muy constante en el que prácticamente se puede surfear unos 340 días al año, lo que le confiere el sobrenombre de la «Factoría de Olas». Tiene varios picos y se surfea en diferentes puntos de marea.
La historia de Pantín está vinculada con el mítico Pantín Classic, un evento con más de 30 años de historia que cada año reúne a la élite del surf internacional en torno a su prueba del circuito de la WSL que llena de color y espectáculo sus preciadas olas.
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